domingo, 29 de abril de 2012

VISTO Y NO COMIDO

He estado muy atenta a las explicaciones que le ha dado JM a L. sobre lo que comió en el sur de Francia, y he estado también espiando las fotos; dijo unos nombres muy raros para los platos, y cómo no sé cómo se llaman dejo que las imágenes hablen por sí mismas.


¡No me hubiera importado probar estas delicatessen (restaurante Le Criquet, Arles), aunque me fuera luego por las patitas abajo!
Pero no todo fueron exquisitices, y también comió en una verbena popular.

(No me hubiera importado estar debajo de esos orondos señores, a ver si caía un poco de esa rica carne con su grasita).
Y JM también trajo un buen recuerdo de las berenjenas a la provenzal, y de las patatas a la ídem.


En fin, a pesar de todo lo que tragó, JM ha vuelto con el mismo peso con el que volvió, ¡será que viajar con 24 adolescentes es mucho mejor dieta que la Dukan! Bueno, lo dejo ya que comienzo a salivar más que el perro de Pavlov. Guau.
Tengo dos nuevos seguidores, Carmen y AdmiratorK  ¡Bienvenidos, amigos!


domingo, 22 de abril de 2012

PERROS POR EL MUNDO

Ha vuelto por fin JM de su viaje, y no he podido resistir echar un vistazo a las fotos que ha traído. He descubierto que allí en Francia dan explicaciones muy detalladas de cómo recoger las cositas de los perros (será que aquí la gente es más lista, o pasa más de recogerlas).

También se le tiene mucho cariño a las mascotas, y se llega a ofrecer recompensas importantes (200€) por las perdidas, en carteles que inundan la ciudad.

Incluso hay un pueblo, Fontvieille, que tiene en su escudo un perro, que decora incluso hasta los cubos de basura.

Por no faltar, hasta el cave canem aparece por triplicado.

Esto me alegra, aunque, como en todas partes, hay sitios en los que no nos dejan entrar, aunque sea en brazos.

Pero lo que más conmovió a JM fue ver a dos mendigos cerca de donde residía que vendaban la pata a un perro suyo herido, y cómo lo acariciaban, y el animal estaba con ellos con su pata vendada. JM les echó monedas cada vez que pasaba a su lado.
Tengo una nueva seguidora, Lobezna, ¡binevenida, amiga!


domingo, 8 de abril de 2012

EXCESO DE CELO













No, lo que estáis viendo no es una obra de Francis Bacon, sino a mí en un ataque de "celo". JM estaba preocupado de ver que no menstrúo aunque tenga todos los síntomas del celo, así que decidió llevarme a la veterinaria. Sí, se que estaba evitando yo hacer más entradas en esta sección tan poco simpática para mí, pero esta vez no he podido evitarlo. No me llevaban a la clínica desde antes del verano pasado, así que me llegó la hora. Allí estaba la veterinaria L., que dijo que me veía estupenda y guapísima (¿me puedo ir entonces?), y, acto seguido, sacó su jeringuilla para ponerme la vacuna anual, al tiempo que me decía que lo me ocurría quedaba dentro de lo normal. Pinchazo y a casa. En ella, sin embargo, me hizo reacción la vacuna, y me puse malita; JM se asustó pues me vió muy paradita, y quejosa, de modo que estuvo conmigo despierto hasta las 4 de la mañana en el sofá, cuando empecé a moverme, y a ir a hacer pipi a la terraza. Ya por la mañana estaba yo ladrando de nuevo a todo quisque, y robando calcetines.

He estado toda esta semana en casa de JM, pero éste se va el miércoles al extranjero con un intercambio escolar durante diez días, así que volveré a casa de V., donde no hay internet, por lo que no podré escribiros esos días, queridas amigas y amigos. Pero volveré (si Dios quiere), como dijo Mc Arthur en Filipinas, y... Terminator.

Entretanto, ¡felices sueños, O. junior!








domingo, 1 de abril de 2012

¡SE ACABÓ LA ESPERA!











¡Uf! Ya era hora. El viernes se fue JM de casa a las 2 y no regresó hasta casi las 5 de la mañana del sábado: se quedó en el hospital hasta que nació O. junior, su sobrino, que se hizo de esperar más de 48 horas. Se lo estuvo pensando para salir (no sé si habrá estando escuchar en el seno materno de la crisis, y esas historias que preocupan tanto a los humanos), y al fin se decidió el tío. Por cierto, que no me importará que me llamen tita Quequi, aunque L., con su gracia habitual, me dijo que yo sería algo así como una "reina destronada", expresión que no entendí muy bien, ¿qué querrá decir? Bueno, ella es así... Lo cierto es que hoy también me han dejado solita unas horas para ir al hospital a ver al pequeño O., aunque éste estaba más pendiente de chupar de la teta de su madre a la que se pega como una ventosa. No dispongo de fotos pues JM no ha querido hacérselas con su viejo móvil con flash (¡vaya crack tecnológico que está hecho!), pero espero que caigan pronto por su (nuestro) portátil. Mientras, me voy a echar una siesta, ¡que ha sido larga y tensa la espera! Guau.

Tengo una nueva seguidora, la Jefaza de Nora ¡bienvenida, amiga!