domingo, 21 de octubre de 2012

QUEQUI LA EXPLORADORA

Bueno, otro día que empieza; y héme aquí explorando la casa; primero, un vistazo a la cocina, a ver si queda algo en el cacharrito, o si aparece algo nuevo como si fuera Reyes.



Luego, torcedura de gesto al no encontrar nada, seguido de visita a la terraza, para hacer mis cosas mañaneras en el suelo nuevo que puso JM este verano pasado.



Y, finalmente, al sofá a esperar a que se levanten las otras chicas de la casa, ¡que no voy yo a ser menos, vamos! Guau.


domingo, 14 de octubre de 2012

DOCUMENTACIÓN, POR FAVOR


Desde que JM me adoptara oficialmente, se han producido algunas novedades; por ejemplo, le han enviado mi D.N.I.; en él aparece un código de identificación con un montón de números, mi nombre, mi especie, y mi raza; aparte del nombre de mi propietario y sus señas. Esta nueva situación me plantea una serie de interrogantes; en primer lugar, sé que los humanos deben llevar siempre encima su D.N.I. para poder ser identificados en caso necesario, y si no lo llevan se exponen a una multa o a algo peor, ¿me pasaría a mí lo mismo?¿dónde lo llevaría, pues?; los humanos tienen bolsillos, y yo... ¿me pondrá JM una mochilita para llevarlo?¿o lo llevará él encima cuando me saque de paseíto?, y en ese caso, ¿no se le olvidará, con lo despistado que es?: espero no acabar en alguna comisaria canina...; en segundo lugar, me pregunto si, ahora que tengo mi D.N.I., no tendré que hacer la declaración del I.R.P.F., como hacen los humanos con carnet de identidad como JM; una tercera y última duda me asalta, ¿cuándo y cómo tendré que renovarlo?; en el D.N.I. de V. pone que debe renovarlo el 9 del 9 del 9999, lo que es mucho tiempo, pero en el mío, ¿qué pasa?, ¿tendré que estar todos los días pendiente del cartero? Espero, queridas amigas y amigos, que esto de la identidad no os cause tantos quebraderos de cabeza como a mí. Guau.

domingo, 7 de octubre de 2012

EL SENTIDO DE LA VIDA


Anda estos días JM muy filosófico y pensativo dándole vueltas al sentido de la vida y la muerte; para mí, que  pienso como el adagio chino que una imagen vale más que mil palabras, ahí va una; pillar un plato de presa ibérica con jamón, salmorejo y patatitas da sentido a toda una vida, aunque sea de perros; y si no os vale este argumento ahí os va otro, en forma de churrasco,


y para aquellos que penséis que la existencia no tiene explicaciones materiales, sino espirituales, aquí tenéis unos filetes de ternera de retinto (¡cuán alargada es tu sombra, Platón, y la de tus Ideas ontológicas!)


Tras zamparse todo esto, JM, es muy fácil divagar en el sofá sobre lo divino y lo humano, y mirar con condescendencia a una representante de una especie considerada inferior porque no tiene acceso a estos argumentos. Yo misma, no obstante, cuando he podido sisar al descuido algún trozo de tierna carnecita de la mesa, y, mientras que no se daban cuenta y ponían el grito en el cielo, me he subido al sofá, y he adoptado un aire pensativo e inteligente, cuando en realidad estaba pensando...¡en la próxima pitanza! ¡corre, que vienen babucha en ristre! Guau.