En Cordes-sur-ciel, un hermoso pueblo turístico cercano a Toulouse, y lleno de talleres de artistas, encontró JM al padre del gato Moustache, un tipo serio y con cara de pocos amigos. ¡Es que el bigote hace mucho! Guau.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario