¡Otra vez me han dejado sola en casa! Ya estoy cansada de estar tirada en el sofá. A ver cuándo vuelven. Lo peor es que luego regresan como si tal cosa: ¡hola, Quequi!, celebrando mis saludos de desesperada. Ya creo oírles, llaman al cristal, sí son ellos, ¡entrad ya, leche! Guau.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario