martes, 31 de julio de 2012

CALORES


¡Qué calor hace! Me he puesto en la terraza, y me estoy asfixiando, ¡cómo ha entrado el verano de fuerte! Estos días ha estado Cádiz llena de humanos que venían a ver a otros humanos que viven en unos barcos de vela (sí que está mal el problema de la vivienda), y visten de blanco, como en los anuncios de detergente. El problema es que ha habido una huelga de basuras (quiero decir, de basureros, quiero decir, de empleados de recogidas de basuras... ¡ay, qué complicado es el lenguaje humano, con lo fácil que es dar un par de ladridos!), y las calles han estado nauseabundas, por lo que JM no ha querido darme paseítos para que no se me infectaran algunas ronchas de dermatitis que me han salido (¡ay, que me veo pronto de nuevo escribiendo en la peor sección de este blog, "crónicas veterinarias", acribillada a inyecciones de mi sonriente veterinaria!) ¡uf, qué calor! ¿y por qué no me meto dentro, y me pongo fresquita tumbada en el suelo del salón? ¡Mira que eres bruta, hija! ¡Felices vacaciones, queridas amigas y amigos! Guau.



domingo, 22 de julio de 2012

NUEVA IMAGEN

JM se ha comprado una nueva cámara, y le está haciendo fotos a todo lo que pilla (creo que está fotografiando hasta las facturas). A mí me ha hecho fotos recién pelada,

y en una de mis posturas favoritas, ya sabéis, dándole la vara a V. cuando come para que me eche alguna cosita.

Espero que cuando se le pase a JM el furor fotográfico, ¡se decida a darme un paseíto! Guau.

domingo, 15 de julio de 2012

BACK TO SANLÚCAR

Hace no mucho estuvo JM con L. y familiares de ésta en un lugar llamado Sanlúcar, tierra de perdición por lo que se verá a continuación. Fueron a comer a un lugar llamado "El gallego" donde se pusieron las botas. (L., con su sagacidad habitual, señaló que parte del bar había sido un antigua casa). Decía JM que le pusieron un pan de dimensiones homéricas (no entiendo muy bien lo que dice, pero lo cuento tal cual; sé que es un tanto pedante, pero es mi amo, y lo tengo que tolerar),

y luego una bandeja mayúscula de choco aliñado,

del que apenas pudieron dar cuenta, antes de que les llegara otro bandejón de pescado surtido (del que imagino que JM no haría fotos porque no le cabría en el encuadre). Tras marcharse alabando lo bien y barato que habían yantado (no sin antes descubrir que uno de los camareros estaba emparentado con la familia de L., oriunda de Sanlúcar), fueron a tomar café al colindante palacio de los duques de Medina Sidonia (no sé si a sentirse como tales un ratito, o a dedicarse a la labranza vistas las fotos)

Tras lo cual, tomaron las de Villadiego en dirección a Cádiz. Por lo que a mí toca, y visto cómo tratan allí a los perros, no iré nunca a Sanlúcar (a menos que me lleven, claro). Guau.


domingo, 8 de julio de 2012

CONVERSACIONES AL FILO


Currito el canario que vino a casa por Reyes hace tiempo que no canta. Está triste, y sólo pía. Ya no sabe L.  qué hacer para que emita sus trinos. Aquí me veis intentando sacarle algo, aunque no sé si es peor el remedio que la enfermedad, pues con mis ladridos sólo parece sobresaltarse, e incluso, cuando me cabreo y no me ve L., le doy un cabezazo a la jaula. Soy un poco bruta. Ahora con el buen tiempo, lo sacan al hueco de la ventana, y se anima a piar un poquito. Sin duda, no debe de ser lo mejor del mundo vivir en una jaula, por muy bien que se cante. Cosas de los humanos, y de sus reglas y normas, que ponen a veces la estética por delante de la ética... bueno, bueno, acabaré de filósofa uno de estos días. Guau.

martes, 3 de julio de 2012

EL ÚLTIMO VIAJE


Hacía unos días que JM observaba preocupado en su parada de las 7:30 que no había rastro ni del gato que allí se encontraba siempre, ni del agua y la comida que le acompañaban. Una mañana encontró esta hoja pegada en la cristalera de la parada, y aquí la reproduzco, en homenaje a aquel gato y a la anónima persona que tanto lo quiso, y que nos da una lección de humanidad. Esa misma tarde desapareció la hoja; quizás a alguien le molestó que le recordara que era también pasajero:

                                              "ÚLTIMA PARADA

Le ha costado decidirse, pero al final este gato vaquita rojizo ha cogido el autobús, para bajarse en la última parada, que es la del Cielo Felino.
No se sabe exactamente cuántos años, quizás más de 8 o 9 llevaba este gato gaditano acampando su vida entre el mar del Campo del Sur y una parada de autobús.
Cuántas confiadas siestecitas han obligado a algún ciclista a frenar en seco, pues este gato plantaba su sueño en medio de la vía ciclista mal diseñada, incluso para un gato.
Conocía perfectamente el horario de las líneas 2 y 7, hasta tal punto que los domingos en que no había servicio se echaba al fresquito del tramo de carretera reservado al transporte público, riéndose de los humanos que esperaban un autobús que ese día nunca llegaría.
Al final se decidió a subir y en su viaje se llevará el recuerdo de las miradas cariñosas, los simpáticos saludos, solidarios cacharritos de surtido pienso y la amistosa agua fresquita que nunca le faltaron.
Parada se marchó de viejectio, como todos los gatos deberían hacer, atesorando una vida libre y llena de respeto de todos los usuarios gaditanos de esa parada tan engatunada.

                                                   ¡FELIZ VIAJE!".