sábado, 28 de mayo de 2011

A DIETA

















Llevo un par de días un tanto inquieta. No hago más que escuchar a L. que JM está "a dieta". Esta expresión no me gusta nada, y me hace temer lo peor. Me explico: al parecer el médico (que parece gente que disfruta amargándole la vida a otros humanos) le ha dicho a JM que si no se pone a dieta y pierde no sé cuántos kilos será diabético en el futuro. Al parecer le salió un poco de azúcar en la sangre (¡qué raro me parece! pues yo sólo veo a JM echarse azúcar en el café); y esto es lo que me escama, pues dicen que el azúcar es también malo para los perros. ¿Acabaré a dieta yo también? No debe ser tan bueno eso de las dietas, pues dicen que hay políticos que abusan de ellas. Por lo pronto, parece que fotos tan jugosas como ésta pasarán a la historia. A JM, encima, le ha dado por preocuparse más por lo que como, y ya no me da nada de lo que tienen en la mesa, a pesar de mi cara de póquer, diciendo que eso lleva especias, que aquello tiene ajo y cebolla y que me hará daño... ¿es que se cree dietista? ¡malditos sean los blogs perrunos donde lee estas cosas!¡son peores que César Millán!


Le han dicho también a JM que tiene que hacer más ejercicio. Para mí esta bien el paseíto de media hora, pero ya hora y media, ¡por favor! así que estoy pensando en quedarme en casa haciendo gimnasia sueca. ¡qué vida! guau.























sábado, 21 de mayo de 2011

ESTRELLAS DEL PASADO






















Hace unos días estaba en el sofá con L. viendo la tele. Y ésta llamó a JM: "mira, la Quequi está en la tele". Me desperté entonces de mi somnolencia, y miré la pantalla. Proyectaban una vieja película española en blanco y negro, "El pasado te acusa". Llegó entonces JM preguntando qué pasaba. "Mira la Quequi en la pantalla". JM miró con incredulidad la pantalla, y dijo: "pues sí que se parece", y empezó a hacerle fotos. Yo me quedé sorprendida: no sabía que hubiera tenido una antepasada artista de cine, lo que me hace concebir esperanzas todavía sobre mi futuro artístico.










Ésta se conducía con gran naturalidad, y no hacía más que robarles planos -creo que así se dice- a los humanos. Era sin duda el centro de atención. No sé si habrá hecho otras películas, si caería en el olvido, o sufriría la censura. La llamaban Cuqui, creo; lo que me confirma más en mi idea de que es antepasada mía. Así puedo entender que yo haya salido tan peculiar, y talentosa. ¡A ver si yo también tengo mi oportunidad! Guau.




















sábado, 14 de mayo de 2011

FESTIVAL CANINO




















El sábado pasado asistí por primera vez a un Festival Canino en Cádiz. Me llevaron JM y L. y allí vi cosas que me habrían dejado sin habla, si yo hablara, claro. Hacía mucho calor en el Parque Genovés, y aquello estaba lleno de congéneres, a los que pude ladrar a placer. Congéneres, digo, aunque vi a algún individuo por ahí, un tanto hierático y estirado, que muy perruno no me pareció, y al que no me acerqué por si las moscas:
















En fin, con esto del cruce de razas, no sé a dónde vamos a ir a parar. Había concursos diversos, por los que me sentí al principio interesada, y un poco enfadada al ver que JM no me había apuntado a ninguno. Aunque al ver a algunos de los participantes, respiré con alivio pues no estoy dispuesta, por nada del mundo, a vestirme de esa manera.



























Había un señor en un escenario, muy cabreado (debía ser un pariente de César Millán), diciendo que estaban los humanos humanizando demasiado a los perros, y que estaba harto de hablar de ello con dueños de canes y que no le hacían caso (si no te hacen caso los perros, poco te lo van a hacer los humanos, tío, además hablando con ese mosqueo). Dijo, además, que los perros debían comer después de sus amos, lo cual me parece bien, ya que comen varias veces al día; lo que no me gustó fue que dijera que no se nos diera nada de la comida humana; pero ¿qué es un perro si no se mete debajo de la mesa a ver si cae algo? Bueno, no quiero ni pensar lo que haría este tipo si se enterara de que llevo un blog... ¡Vaya humanos!¡qué vergüenza tenemos a veces que pasar! Guau.

sábado, 7 de mayo de 2011

LA INQUILINA



















Ya me pica otra vez... ¡venga, a rascarse, toca! El picor se me corre de un lado a otro y no doy a basto... ¿qué es lo que me pasa? Me quedo mirando a JM, y éste parece no darse cuenta. Al fin, le comenta a L. que me estoy rascando mucho últimamente, y ésta le comenta distraídamente que igual me pica como a las personas. Luego, JM me lleva a casa de V. y le dice que me observe. Sigo rascándome, de todas maneras ¿por qué me pica? Entonces, llega O., el hermano pequeño de JM. De éste dicen que tiene malas pulgas cuando se enfada, y que es "el único que me entiende". Así, que me quedo quietecita mientras me coge y comienza a "expulgarme", como dice V. (pero, ¿en qué quedamos?¿no era O. el que tenía las malas pulgas?). Al rato, ¡oh, sorpresa! me encuentra una "pulguita", una, ¡será canalla! ¡con lo que me picaba! Me la quita, y me quedo... bueno, ya sabéis el refrán...


Al día siguiente vuelven V. y O. con una cosa que llaman "pipeta" -historia que se repite más o menos cada mes-, y que contiene un líquido maloliente, que O. (no es cuestión de resistirse y me quedo muy quieta), me extiende tras hacerme la raya en medio hasta la cola. ¡Lo que tengo que hacer para darles gusto, y se sientan útiles! Guau.